Ignoraba esas declaraciones del consejero Corpas despreciando los valores locales en área cultural: "Los buenos se van fuera y los malos se quedan aquí". http://noticiasdenavarra.com/2010/01/29/ocio-y-cultura/cultura/el-consejero-corpas-falta-a-la-verdad-cuando-dice-que-queremos-vivir-de-las-subvenciones
No sé cómo no se ha producido una desbandada y hemos dejado despoblada la Comunidad, en un vano intento de salvar nuestra escasa dignidad.
Me pregunto cuáles son los parámetros que delimiten triunfo y fracaso al criterio de este señor. ¿Un pintor que únicamente triunfa en Pamplona, un cineasta que se dedica a la promoción del terruño, un director de teatro escolar, un escritor local, un periodista que no salta a un medio estatal, un actor que no encuentra trabajo en el circuíto nacional, un músico que no toca en el Metropólitan, un cantante sin proyección internacional, un bailarín que no tiene ni para zapatillas, etc., etc., un médico devenido en político, un poeta sin poesía, un comunista renegado? ¿Por qué no se inicia una campaña de recuperación de talentos fugados ofreciéndoles algo más que un bolo en Javier? "¿Cuál es el nivel de tolerancia al fracaso?".¿Es un indicador volar en helicóptero? ¿Ser un político local y no nacional, o internacional? ¿Que tus poemas los reciten actores aficionados dirigidos por directores que no logran el salto nacional en espectáculos a medida (léase Duguna)?. Podría seguir, pero no es el momento. Supongo que nunca veremos promocionada nuestra actividad artístico cultural más allá de la comparsa de gigantes y cabezudos, pero eso ya es suficiente para una buena capitalidad. Qué tristeza.
¿Qué habría hecho este buen señor de leerle a este dinamitador cultural?:
David Monteagudo, 48 años, le ha costado mucho publicar la primera novela, Fin.
"Meto cajas en la máquina". "No quiero hacerme falsas ilusiones. Te crees un genio y estás currando en una fábrica. Los sueños son una cosa y las aspiraciones otra.
Me pregunto si es mal de altura el que afecta a ciertas gentes que no parecen oxigenar adecuadamente. Debe ser eso. Hay una canción que le quiero dedicar: Para Juan Ramón, de Paquita, esperando que le guste, ya que es de proyección internacional. Para que no se olvide: El uno el dos el tres, de Mecano:
Ese dia un dia llegara
no sera pronto ni tarde
cuando no queda cerilla ya
es el dedo lo que arde
Lo que sube habra de descender
y aunque mientras la escalada
no es cuestion de mirarse a los pies
no se yo si esta cordada
ha pensado en la bajada
Que si ese dia la tortilla da la vuelta
vereis que pocos nos quedamos en cubierta
El uno, el dos, el tres
y para de contar
que al escondite ingles
se han puesto los demas
El uno, el dos, el tres
y para de cantar
porque a ninguno le interesa escuchar
Aunque en la foto aparentemos mas
somos solo tres polillas
que de tanto dar contra el cristal
se han colado en la bombilla
hasta que la luz de este quinque
ya no sea lo que era
y se encienda solo para que
se la vea desde fuera
como la de la nevera
Si de ese cuajo la tortilla da la vuelta
vereis que pocos nos quedamos en cubierta
El uno, el dos, el tres
y para de contar
que al escondite ingles
se han puesto los demas
El uno, el dos, el tres
y para de cantar
porque a ninguno le interesa escuchar
Y quiza volvamos al local
a cantar para nosotros
lo de `Hoy no me puedo levantar`
y dejar que esa chorrada
nos empañe la mirada
Lagrimas de agua pasada
despintando la fachada
no sera pronto ni tarde
cuando no queda cerilla ya
es el dedo lo que arde
Lo que sube habra de descender
y aunque mientras la escalada
no es cuestion de mirarse a los pies
no se yo si esta cordada
ha pensado en la bajada
Que si ese dia la tortilla da la vuelta
vereis que pocos nos quedamos en cubierta
El uno, el dos, el tres
y para de contar
que al escondite ingles
se han puesto los demas
El uno, el dos, el tres
y para de cantar
porque a ninguno le interesa escuchar
Aunque en la foto aparentemos mas
somos solo tres polillas
que de tanto dar contra el cristal
se han colado en la bombilla
hasta que la luz de este quinque
ya no sea lo que era
y se encienda solo para que
se la vea desde fuera
como la de la nevera
Si de ese cuajo la tortilla da la vuelta
vereis que pocos nos quedamos en cubierta
El uno, el dos, el tres
y para de contar
que al escondite ingles
se han puesto los demas
El uno, el dos, el tres
y para de cantar
porque a ninguno le interesa escuchar
Y quiza volvamos al local
a cantar para nosotros
lo de `Hoy no me puedo levantar`
y dejar que esa chorrada
nos empañe la mirada
Lagrimas de agua pasada
despintando la fachada
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